Escotes asimétricos

Maria Palacios con traje de Rosa Clara

Una de las variantes más populares junto con el escote "palabra de honor"(PdH) es el escote asimétrico.

A diferencia del "PdH" se trata de un escote verdaderamente complejo de adornar con joyas, aunque no  imposible como veíamos el pasado mes de julio con Genoveva Casanova en la entrada "joyas para el verano" (ver entrada) y es precisamente en estas opciones donde se aprecia la capacidad de elegir y combinar las joyas para crear una imagen verdaderamente diferente, auténticamente "Chic".

La opción más común es resolver el problema "asimetrico" colocandose unos largísimos pendientes simétricos que lo "rellenen" todo. Nada mas lejos de la realidad: por muy largos que sean los pendientes, estos no tienen capacidad de rellenar, iluminar y dar gracia a un  enorme, árido y vulgar escote. 

El collar o el colgante son muy importantes e imprescindibles con amplios escotes.

Dos son los motivos que lo justifican:

1.- El pecho a la vista es ordinario, es vulgar y por lo tanto ni es refinado ni es sexy. Un cierto "velo", un pequeño "juego", es siempre más interesante y por lo tanto más "chic".

2.- El collar complementa e ilumina pecho y cara, y por lo tanto embellece.

Pero vamos a los escotes asimétricos que tocan hoy.

Kate Middleton

Kate, una de mis favoritas, lo tiene claro:

El escote asimétrico; muy alto y con amplios pliegues, hubiera hecho imposible una buena caída de cualquier collar posible. Por esto Kate opta, como complemento de adorno al hombro que necesita su vestido, por la opción "broche". La "margarita" de tela, por tratarse de este homenaje tan inglés estaba, en esta ocasión, justificando con gracia la ausencia de joya.

El escote asimétrico es perfecto para dar un toque "chic" al vestido con un adorno al hombro. La solución del pendiente largo es demasiado "fácil", y por tanto común.

Los siguientes ejemplos "asimétricos" nos plantean problemáticas asimétricas:

Por un lado Elena Ballesteros con vestido de una pieza hasta los pies, y por otro Margarita Vargas con vestido cortado a la cintura por un amplio cinturón de cáñamo.
Ambos escotes son similares en cuanto a su altura, pero las mejores soluciones para cada caso diferentes, debido a la circustancia de las "dos piezas" de Margarita frente al vestido largo de Elena.

Elena Ballesteros

Mientras que el vestido largo de Elena requiere volumen al cuello que complete, estilice y de relieve a esa imagen de una sola pieza, de arriba a abajo, Margarita necesita algo que simplemente ilumine y de gracia a ese inmenso pecho y hombro áridos y aburridos en la corta distancia.

Margarita Vargas Duquesa de Anjou

Los largos y llamativos pendientes de la guapa duquesa llaman demasiado la atención, son demasiado protagonistas, no aportan distinción y no le ayudan a adornar la desnudez de su pecho y hombro. Unos pendientes mas sencillos, más cortos (no cortos) y sobre todo un moderno broche al hombro, hubiera ayudado a poner un foco de atención en el otro hombro y que la aridez de este no fueran tan llamativa.

El caso de Elena, aunque no os guste, es "cristalino": Ese azul tan clásico, tan solemne y ese talle tan majestuoso, de una pieza, clama por un collar de perlas tamaño gargantilla (35-40cm) que le aportara volumen y luz en la larga distancia.

Hay que tener en cuenta que el color "marino" es tan solemne que aun teniendo  28 años y el tipo de Lara Croft obliga a una cierta "formalidad" y los complementos tienen que ir en consonancia.
 
Elena prefirió enjoyarse con "semis". El problema de las piedras de color es que no iluminan y por tanto son mejor opción para vestidos claros. Elena lo tenia complicado al elegir estos bonitos pendientes y su opción solo pasaba por un collar de rubelitas, pulidas, sin tallar y enfiladas, no montadas, que hubiera sido sin duda mucho más interesante, más completo, que un cuello huerfano.

Otro excelente ejemplo para las perlas nos lo ofrece Enma Roberts. 

 

Emma Roberts

Piel rosada, escote asimetrico, vestido salmon... 
¿De verdad pensais que unas finas perlas le hubieran hecho mayor?. 

Y una bonita perla de lagrima de pendientes... 

¿No le hubieran iluminado muchísimo más?

Mi opinión es que la moda tiene que re-descubrir las perlas. Pocas cosas hay tan favorecedoras y tan elegantes para una mujer como las perlas. Las perlas tienen muchas variantes y no hace falta caer en la imagen de la mujer de una cierta edad con el collar de australianas. 





Último asimétrico y más difícil todavía: María León.

María León

Tipazo, minimalista, modernista, negro y... guerrero.

Pues una pena que esta mujer no fuera pisando fuerte en toda su feminidad con unos pendientes de diamantes sencillos, con ligera caída y un diamante solitario con una fina cadena al cuello.  Pero en el caso de Maria se me ocurren otras opciones menos convencionales, como puede ser una moderna cadena de oro amarillo y pendientes cortos también amarillos, o incluso unos llamativos pendientes de brillantes como los de Margarita en la foto anterior, pero en ningún caso "limpita" como si acabara de salir de la ducha.

María: Sin joyas... no hay glamour

¡Sed Buenos!